TARTA DE QUESO (Sin horno)

¡Buenas! ¿Qué tal lleváis el veranito?, pues yo tratando de aguantar las altísimas temperaturas extremeñas de la mejor manera posible, y para ello, una de las cosas que he aparcado hasta septiembre (u octubre, ya se verá, jajaja) es el horno, pero como no puedo estar sin cocinar, he decidido hacer cosas de lo más fresquitas posibles, como la receta que os traigo hoy, una deliciosa CHEESECAKE (o TARTA DE QUESO para los más tradicionales), elaborada en frío, es decir, SIN HORNO, y, por supuesto, SIN LACTOSA y también SIN GLÚTEN.... ¿gustáis?, ¿sí? pues al lío... ¡COMENZAMOS!

INGREDIENTES:

- 600 GRS. DE QUESO CREMA SIN LACTOSA (click aquí para ver la receta) .

- 400 GRS. DE NATA PARA POSTRES SIN LACTOSA.

- 120 GRS. DE AZÚCAR.

- 2 CUCHARAS SOPERAS DE QUESO CURADO EN POLVO (SIN LACTOSA)

- ESENCIA DE VAINILLA (1 cuchara sopera).

- 6 LÁMINAS DE GELATINA NEUTRA + 1/2 VASO DE LECHE TIBIA.

- 250 GRS. DE GALLETAS SIN LACTOSA Y SIN GLÚTEN.

- 90 GRS. DE MANTEQUILLA SIN LACTOSA.

- MERMELADA DE FRESAS, o la que más os guste (clíck aquí para ver la receta).

- 3 LÁMINAS DE GELATINA NEUTRA + 1/2 VASO DE AGUA.

- FRUTAS NATURALES PARA DECORAR.

ELABORACIÓN:

BASE DE LA TARTA:

- Metemos las galletas en una bolsa y las rituramos con un rodillo (o una botella de cristal) hasta dejarlas con textura de arenilla.

- Derretimos la mantequilla y se la añadimos a las galletas pulverizadas.

- Mezclamos bien hasta que quede totalmente integrado.

- Cubrimos el fondo de un molde desmontable y presionamos con la mano  hasta dejar una base firme, uniforme y lisa.

- Llevamos a la nevera para que endurezca.

LA TARTA DE QUESO:

- Montamos la nata bien firme y la llevamos a la nevera (TRUCO: Para que la nata monte bien y quede bien firme, meto el recipiente, las varillas y la nata unos 10 minutos antes en el congelador).

- Hidratamos las 6 láminas de gelatina neutra en un poco de agua fría.

- En un recipiente amplio ponemos el queso crema, el azúcar, la esencia de vainilla y el queso en polvo y mezclamos bien hasta que quede completamente integrado.

- Agregamos la nata montada a la crema, poco a poco y realizando movimientos envolventes, consiguiendo así una textura ligera tipo mousse.

- Entibiamos el 1/2 vaso de leche y diluímos en él la gelatina hidratada.

- Incorporamos la gelatina diluída a la crema de queso, mezclando cuidadosamente hasta que quede totalmente integrado.

- Ponemos la crema de queso en el molde con base de galleta y llevamos a la nevera, como mínimo, durante 4 horas.

COBERTURA:

- Hidratamos las 3 láminas de gelatina neutra en el 1/2 vaso de agua.

- En un cacillo ponemos la mermelada y calentamos durante unos minutos (no tiene que llegar a hervir, sólo calentar).

- Sin quitar del fuego, agregamos la gelatina hidratada y calentamos dos minutos más.

- Retiramos del fuego y dejamos atemperar un par de minutos.

- Sacamos la tarta de la nevera, y, con la ayuda de un tenedor, rallamos toda la superficie de la tarta, así conseguiremos mayor adherencia y evitamos que la mermelada se separe de la tarta.

- Cubrimos con la mermelada y ponemos las frutas naturales.

- Llevamos a la nevera hasta el momento de consumir.

Y ¡LISTO!

Ya tenemos nuestra deliciosa TARTA DE QUESO fresquita, sin lactosa, sin glúten y sin necesidad de encender el horno, genial ¿no?.

Bueno, pues hasta aquí la receta de hoy, fácil ¿verdad?, pues ¡ale! qué no se diga que por culpa del calor no tomamos ricos postres fresquitos, jejeje.

Y ya me despido, y os recuerdo que me encanta teneros por aquí, así que si tenéis alguna duda sobre esta o el resto de recetas, o alguna sugerencia, o, simplemente queréis saludar....¡no os cortéis! que estaré requete-encantada de contestaros.

UN BESAZO GIGANTE A TOD@S Y ¡HASTA PRONTO!